Los cuadros más oscuros del arte y el arte como una representación de los instintos más oscuros:
Francisco de Goya y Lucientes (1746-1828). Tras una grave enfermedad su obra empieza a acercarse a una pintura más creativa y original, que expresa temáticas menos amables que los modelos que hasta entonces había pintado para la decoración de los palacios reales.
Su capricho e invención reflejan ahora horribles crímenes y las atrocidades de la guerra, con escenas de violaciones, latrocinios, asesinatos a sangre fría o canibalismo, en hospicios o manicomios, sótanos o cuevas. Todo marginalidad y vejación. No nos puede extrañar que el contenido de sus imágenes se considerara peligroso para la época por su mordacidad. Y es que el sueño de la razón produce monstruos…
El pintor fantástico Zdzislaw Beksisnki (1929-2005), dejó un legado inclasificable para muchos, incluso para él mismo… Su trabajo no deja precisamente indiferente.
Aficionado a la fotografía y la escultura, campo en el que realizó algunas obras en plástico y alambre todas de temas inquietantes, fue la pintura y el dibujo lo que impulsaría su carrera, y pronto comenzó a plasmar en sus dibujos lo que él llamaba “realismo fantástico”, influenciado por el estilo abstracto, el barroco y el gótico, y añadiendo, según iba evolucionando su obra, toques de arte surrealista.
“Deseo pintar de la misma forma como si estuviese fotografiando los sueños”. Su perfección hizo que en 1977 quemara gran parte de su trabajo en el patio de su casa.
En febrero de 2005 fue asesinado por el hijo del conserje del edificio donde vivía Beksinski, cuando se negó a prestarle el dinero que éste le pedía.
Maya Kulenovic (1975) natural de Sarajevo, define sus pinturas como “los mundos sin luz” y habla de su arte así:
“(…) Creo que mi pintura expresa algo del carácter poco fiable de nuestro sentido de seguridad, las posesiones y el conocimiento, nuestro ilimitado potencial de violencia, así como la compasión y la eterna búsqueda de la espiritualidad de algún tipo, como la esperanza o el amor incondicional”.
Las pinturas de Maya Kulenovic atacan directamente las emociones oscuras y son una combinación de vulnerabilidad y fuerza.
Usa esmaltes translúcidos y una oscura paleta para crear efectos de claroscuro (muy oscuros) que recuerdan a Rembrandt y Caravaggio.
El macabro ilustrador Grzegorz Kmin (1972), es conocido por recrear mundos tan solo existentes en las peores pesadillas. Su delirio detallista y macabro no pasa nada por alto de la anatomía humana y es que en realidad Kmin es neurofisólogo, aunque según parece no era esa su intención ya que su carrera en bellas artes no acabó demasiado bien y terminó por estudiar biología. Pese a ello, nunca dejó de realizar sus bocetos e ilustraciones, que como se puede apreciar le valían para poner en práctica lo aprendido en la clase de disección.
Su trabajo produce, cuanto menos, temblores y sudores fríos.
La obra de Fred Einaudi (1971) mezcla lo real y lo irreal, la inocencia de la niñez y la muerte, y encierra un fondo inquietante lleno de contrastes. Un decorado tierno y blando rodeado de un mundo oscuro y sucio. Parece que "la idea de la muerte", ronda a este artista, la muerte como evento impreciso pero seguro. Y es esta concepción la que se filtra a través del pincel en su obra, plena de simbología, que nos da esa sensación subyacente de obscuridad, que inquieta y apesadumbra, ese cierto carácter ambiguo que nos deja en silencio.
Michael Hussar (1964) resume su obra como “una vouyerista percepción de la humanidad, con monstruos y falsedad, una maravilla gótica que ilumina el área gris entre verdades y mentiras”.
Sus pinturas contienen un elevado tono macabro mezclado con una perversa carga burlona y desprenden una fuerza demencial increíble, ahondando en ese estado desequilibrado de la raza humana que a veces, sólo a veces, puede ser tan fascinante.
Las ilustraciones de la artista japonesa Yuka Yamagochi son infantilmente grotescas: “Para mí las cosas irreales son creadas en una realidad: mi realidad. Lo que dibujo está profundamente conectado a como me siento en ese momento. Mis imágenes son representaciones de mis ideas y emociones captadas por lápices de color, así es como expreso mi realidad.” También dice que “los humanos están conectados con los animales, no al revés. Nuestro comportamiento es bastante animal.” Y no hay más que ver su obra para encontrar la aplicación directa a esta afirmación…
Yuka es autodidacta y reside en Canadá, allí decidió crear un blog para dar a conocer sus ilustraciones, donde el colorido de la forma contrasta con la oscuridad del contenido.
Podemos decir que el arte tiene una capacidad, la de provocar sensaciones. El arte gusta o no, a veces incomoda, provoca, inquieta… las ilustraciones de Yuka consiguen todo eso al mismo tiempo.
Fuentes:
tejiendoelmundo.wordpress.com/2011/09/28/la-pintura-fantastica-de-beksinski/#more-21177
elrincondelperromugre.blogspot.com.es/2010/11/maya-kulenovic-la-pintura-de-la-sombra.html
universolamaga.com/blog/?p=1243
opresivo.blogspot.com.es/2012/05/fred-einaudi-la-futilidad-como-motor.html
anartjunkie.wordpress.com/2010/03/12/dibujar-es-algo-interno-yuka-yamaguchi/
Google imágenes.
5 comentarios:
Tremebundos, me quedo de todsas con Goya y el sueñoq eu produce lcoos...un abarzo.
Vivir para ver....qué obras, eso sí que da miedo. ¡Qué dolores ocultos tendrían para plasmar esos horrores!
Me encanta la manifestación del arte, así que me parece, como poco, muy interesante, Ana.
Me gusta mucho esta sección, y en especial, este post.
Abrazos mil: Carol
Hola Prometeo, hay que reconocer que Goya tremebundo era un rato, y va a ser que sí, que los sueños de la razón son monstruosos.
Gracias por seguir por aquí.
Un abrazo
;)
Hola Carol, dolores, horrores, obcesiones, perversiones de la mente, reflejos oscuros y muy siniestros los que destilan estos dibujos, cuadros e ilustraciones.
El arte es un vehículo mas, el mas gráfico, para expresar todos esos tormentos del alma y esos miedos, y a mí también me parece interesante todo lo que somos capaces de producir.
Me alegro que te guste el post.
Abrazos diez mil, Ana
;)
Lo cierto es que este arte no deja indiferente... imposible. Perturba y da mal rollo. No, definitivamente no colgaría uno de estos en mi casa... demasiado siniestro. Mejor los bodegones de toda la vida :)
Besos.
Horror, ¿que tú prefieres unos bodegones a esto? Oh, que visión del arte tan desgastado, por fsvor, no se puede comparar, imaginate levantarte a medianoche para ir al baño y ver colgado en el pasillo un frutero, ¡me dan escalofríos!
:D
Besos
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