El momento de cine que he escogido hoy pertenece a la película "Top Hat” conocida en castellano como “Sombrero de copa”. En ella Jerry Travers (Fred Astaire) canta “mejilla a mejilla” para Dale Tremont (Ginger Rogers) la chica a la que quiere conquistar, y de la que esta enamorado.
Trama: Jerry Travers, un astro de la comedia musical americana, llega a Londres y se instala en la habitación del productor de su obra, Horace Hardwick. El azar le hace conocer a la bella modelo Dale Tremont, que se aloja en la habitación de abajo. Ella le toma, erróneamente, por Hardwick y, al enterarse que está casado (en realidad, y aunque no lo sabe, con una amiga suya, Madge), le rechaza y viaja con su jefe, el modisto Alberto Beddini, a Venecia, donde, por despecho, se casará con él.
La película fue nominada a cuatro Oscar, entre ellos: mejor película, mejor dirección artística, mejor canción original por “Cheek to cheek” y mejor coreografía (Hermes Pan, para “Piccolino” y “Top Hat”) No obstante el film no se llevó ninguna de las estatuillas para las que estaba nominada.
En 1990, Top Hat fue seleccionada para su preservación en el “United States National Film Registry” de la Biblioteca del Congreso como “cultural, histórica o estéticamente significativa”.
En 2006 esta película se situó en el número 15 de la lista de los mejores musicales en el “American Film Institute”
La película fue nominada a cuatro Oscar, entre ellos: mejor película, mejor dirección artística, mejor canción original por “Cheek to cheek” y mejor coreografía (Hermes Pan, para “Piccolino” y “Top Hat”) No obstante el film no se llevó ninguna de las estatuillas para las que estaba nominada.
En 1990, Top Hat fue seleccionada para su preservación en el “United States National Film Registry” de la Biblioteca del Congreso como “cultural, histórica o estéticamente significativa”.
En 2006 esta película se situó en el número 15 de la lista de los mejores musicales en el “American Film Institute”
Curiosidades y anécdotas de rodaje:
*Sombrero de copa se comenzó a filmar el 1 de abril 1935 y su coste ascendió a 620.000 dólares. El rodaje terminó en junio, casi dos meses después. La película tuvo que someterse a una serie de recortes, aproximadamente diez minutos del metraje, sobre todo en la última parte de la película: la secuencia de carnaval y el desfile de góndolas que había sido filmada para presumir de un enorme conjunto se redujeron en gran medida. Otros cuatro minutos se cortaron antes de su estreno en el Radio City Music Hall, donde batió todos los récords, ya que la película llegó a recaudar 3 millones de dólares en su lanzamiento inicial, y se convirtió en una de las más rentables para RKO en la década de 1930.
* Dwight Taylor fue el guionista principal, quien fue el encargado del primer guión escrito especialmente para la pareja Astaire-Rogers. Sin embargo Fred Astaire reaccionó negativamente a los primeros borradores, quejándose de que la trama, palabras textuales: "sigue, muy de cerca, el modelo de La alegre divorciada”, anterior película del actor y bailarín.
*Bernard Newman estaba nominalmente a cargo de vestir a las estrellas, pero para esta ocasión Ginger Rogers estaba muy interesada en el diseño de vestuario y maquillaje. Para el número de “Cheek to cheek” estaba decidida a utilizar su propia creación: “Yo estaba decidida a llevar ese vestido, contra viento y marea, y ¿por qué no? Se movía maravillosamente. Obviamente nadie del equipo estaba dispuesto a tomar partido”
Cada pluma de avestruz requirió una enorme labor de costura, aquel vestido supuso un enorme trabajo. Cuando Astaire vio el vestido por primera vez el día de la filmación, se quedó horrorizado por la forma en que después de cada giro y vuelta aquello soltaba enormes nubes de plumas; mas tarde recordó: “Era como un pollo atacado por un coyote, nunca he visto tantas plumas en mi vida.".
En un momento dado y de acuerdo con el coreógrafo Hermes Pan, Astaire perdió los estribos y le gritó a Rogers, quien de inmediato se echó a llorar desconsolada. La inseparable madre de la artista, Lela, cargó sobre él como una madre rinoceronte protege a sus crías.
Luego de adicionales horas de trabajo nocturno por parte de una de las costureras, se pudo solucionar en gran parte el problema, sin embargo, si examinamos detenidamente el baile en la película veremos plumas flotando alrededor de Astaire y Rogers, así como alguna que otra tirada en la pista de baile.
*En aquel año de 1935 Fred estaba en un momento de éxito, disfrutaba con su trabajo aunque no soportara muy bien a Ginger. Trabajaba con Howard Hughes, el magnate que no ponía muchos impedimentos y sí mucho dinero. De hecho, ya estaba todo listo para empezar el rodaje, con Fred Astaire y varios extras, en los antiguos platós que tenía la RKO en Culver City… cuando llegó una llamada del despacho de Hughes, en Hollywood, a diez kilómetros de distancia, unos veinte minutos en coche. Hughes quería ver un ensayo antes de filmarlo.
El productor señaló que esperaría a que llegara el jefe para verlo. Pero Hughes tenía otra idea: "Quiero que desmonten los decorados y que los traigan con todo el mobiliario, los intérpretes y el vestuario a los estudios de Goldwyn".
Sin más discusión, los operarios trabajaron hasta muy tarde para trasladar los decorados, y el director y los intérpretes ayudaron a levantarlos esa misma tarde. Hughes se presentó a ver el ensayo durante unos minutos, dio su asentimiento y se fue. La filmación continuó sin más interferencias. Ahorrar el viaje a Hughes costó 30.000 dólares en una época en la que los directores europeos hacían películas enteras con esa cantidad.
*Según se rumoreó por Hollywood en la década de los 30, en un informe de una prueba cinematográfica de Fred Astaire con RKO Pictures, ahora perdido junto con la prueba, se supone que se leía: "No sabe cantar. No sabe actuar. Con entradas. Sabe bailar un poco."
El productor de las películas de Astaire-Rogers, Pandro S. Berman afirmó que él jamás había dicho tales cosas, aunque años mas tarde, en una entrevista de Fred en 1980 éste insistió que en el informe ponía realmente: "No sabe actuar. Ligeramente calvo. También baila".
El encargado de la prueba fue David O. Selznick, quien la describió como "espantoso".
Aunque claramente la primera prueba de Astaire fue decepcionante y espantosa, eso no afectó a los planes de la RKO para Astaire, primero prestándolo durante unos pocos días a MGM en 1933 para su debut en Hollywood, donde apareció como él mismo bailando con Joan Crawford en la exitosa película musical “Dancing Lady”.
UNA PAREJA INOLVIDABLE
Ginger Rogers se convirtió de la noche a la mañana en la mejor pareja de baile de Astaire. Juntos, desde 1933 hasta 1939 hicieron nueve musicales para RKO y dieron un nuevo sentido al musical cinematográfico, introduciendo rutinas de baile envueltos en una excelente elegancia y virtuosismo, componiendo canciones que se convirtieron en éxitos como "Cheek to cheek", "They Can´t Take That Away From Me" o "They All Laughed". Aún hoy en día, la expresión "Fred y Ginger" todavía es referencia de una de las parejas más grandes de la historia del cine.
Croce y John Mueller consideraron en 1933 hacer de Ginger Rogers la pareja perfecta de Astaire, principalmente por su habilidad de combinar sus dotes de baile, su belleza natural y sus excepcionales dotes dramáticas y cómicas. El resultado lo describió a la perfección Katharine Hepburn: "Ella da la sensualidad, él, la clase".
Mueller resume las capacidades de Rogers como sigue: "Rogers sobresalía entre las parejas de Astaire no porque fuera superior a otras como bailarina sino porque, como una actriz intuitiva y hábil, ella era suficientemente cautelosa para darse cuenta que la interpretación no acababa cuando el baile comenzaba ... la razón por la que muchas mujeres han fantaseado bailar con Fred Astaire es que Ginger Rogers transmitía la impresión de que bailar con él es la experiencia más emocionante imaginable." Según Astaire, "Ginger nunca había bailado con una pareja anteriormente. Ella lo fingió muchísimo. No sabía hacer claqué y no sabía hacer esto y aquello... pero Ginger tenía estilo y talento y lo mejoró mientras le acompañaba. Lo entendió tanto que después de un tiempo cualquiera que bailaba conmigo me parecía que lo hacía mal."
Aunque los números los realizaba Astaire con su ayudante Hermes Pan, ambos reconocieron el mérito de Rogers y pronto dejaron que entrara en el proceso de creación, dando su punto de vista y toque personal a los números. Paradójicamente el público siempre consideró a Rogers mejor bailarina de lo que fue, y a Astaire peor actor de lo que en realidad demostró ser.
De esa prolífica carrera juntos, hay que destacar los grandes números cómicos de "I'll Be Hard To Handle" de Roberta, de (1935), "I'm Putting All My Eggs In One Basket" de Sigamos la flota (Follow the Fleet), de Mark Sandrich (1936) o "Pick Yourself Up" de Swing Time ("En alas de la danza") (1936), de George Stevens. U otros de gran romanticismo como "They Can´t Take That Away From Me" (canción que Fred en la película Ritmo loco (1937) de Mark Sandrich, donde canta a Ginger durante una travesía en ferry).
Tampoco hemos de olvidar sus grandes bailes como "Smoke Gets In Your Eyes" de Roberta (1935) de William A. Seiter, "Cheek To Cheek" de Sombrero de copa (Top Hat) (1935), dirigida por Mark Sandrich o "Let's Face the Music and Dance" de Sigamos la flota (Follow the Fleet) (1936) o "Let´s Call the Whole Thing Off" de "Ritmo loco" en un maravilloso baile en una pista de patinaje neoyorquina. La serie se cerraría con Amanda (Carefree) (1938), de Mark Sandrich y La historia de Irene Castle ("The story of Vernon and Irene Castle"), de H.C. Potter (1939). La separación se debió principalmente a la intención de ambos artistas de seguir creciendo en sus carreras así como un cierto recelo de Rogers hacia el director Mark Sandrich. Al parecer estaba un tanto descontenta porque Sandrich dedicaba toda su atención y sus elogios hacia Astaire, dejándola a ella un tanto de lado.
Aún así, hubo una décima película en la que volvieron a unir sus grandes talentos. Tras una larga etapa sin colaborar, el reencuentro se produjo en Vuelve a mí (1949) ("The barkleys of broadway", de Charles Walters, donde Ginger fue la elegida para sustituir a la malograda Judy Garland, quien había conseguido un gran triunfo junto a Astaire en Desfile de Pascua (1948).
Esa pareja y la coreografía de Astaire y Hermes Pan, ayudaron a hacer del baile un elemento importante de las películas musicales de Hollywood.
Croce y John Mueller consideraron en 1933 hacer de Ginger Rogers la pareja perfecta de Astaire, principalmente por su habilidad de combinar sus dotes de baile, su belleza natural y sus excepcionales dotes dramáticas y cómicas. El resultado lo describió a la perfección Katharine Hepburn: "Ella da la sensualidad, él, la clase".
Mueller resume las capacidades de Rogers como sigue: "Rogers sobresalía entre las parejas de Astaire no porque fuera superior a otras como bailarina sino porque, como una actriz intuitiva y hábil, ella era suficientemente cautelosa para darse cuenta que la interpretación no acababa cuando el baile comenzaba ... la razón por la que muchas mujeres han fantaseado bailar con Fred Astaire es que Ginger Rogers transmitía la impresión de que bailar con él es la experiencia más emocionante imaginable." Según Astaire, "Ginger nunca había bailado con una pareja anteriormente. Ella lo fingió muchísimo. No sabía hacer claqué y no sabía hacer esto y aquello... pero Ginger tenía estilo y talento y lo mejoró mientras le acompañaba. Lo entendió tanto que después de un tiempo cualquiera que bailaba conmigo me parecía que lo hacía mal."
Aunque los números los realizaba Astaire con su ayudante Hermes Pan, ambos reconocieron el mérito de Rogers y pronto dejaron que entrara en el proceso de creación, dando su punto de vista y toque personal a los números. Paradójicamente el público siempre consideró a Rogers mejor bailarina de lo que fue, y a Astaire peor actor de lo que en realidad demostró ser.
De esa prolífica carrera juntos, hay que destacar los grandes números cómicos de "I'll Be Hard To Handle" de Roberta, de (1935), "I'm Putting All My Eggs In One Basket" de Sigamos la flota (Follow the Fleet), de Mark Sandrich (1936) o "Pick Yourself Up" de Swing Time ("En alas de la danza") (1936), de George Stevens. U otros de gran romanticismo como "They Can´t Take That Away From Me" (canción que Fred en la película Ritmo loco (1937) de Mark Sandrich, donde canta a Ginger durante una travesía en ferry).
Tampoco hemos de olvidar sus grandes bailes como "Smoke Gets In Your Eyes" de Roberta (1935) de William A. Seiter, "Cheek To Cheek" de Sombrero de copa (Top Hat) (1935), dirigida por Mark Sandrich o "Let's Face the Music and Dance" de Sigamos la flota (Follow the Fleet) (1936) o "Let´s Call the Whole Thing Off" de "Ritmo loco" en un maravilloso baile en una pista de patinaje neoyorquina. La serie se cerraría con Amanda (Carefree) (1938), de Mark Sandrich y La historia de Irene Castle ("The story of Vernon and Irene Castle"), de H.C. Potter (1939). La separación se debió principalmente a la intención de ambos artistas de seguir creciendo en sus carreras así como un cierto recelo de Rogers hacia el director Mark Sandrich. Al parecer estaba un tanto descontenta porque Sandrich dedicaba toda su atención y sus elogios hacia Astaire, dejándola a ella un tanto de lado.
Aún así, hubo una décima película en la que volvieron a unir sus grandes talentos. Tras una larga etapa sin colaborar, el reencuentro se produjo en Vuelve a mí (1949) ("The barkleys of broadway", de Charles Walters, donde Ginger fue la elegida para sustituir a la malograda Judy Garland, quien había conseguido un gran triunfo junto a Astaire en Desfile de Pascua (1948).
Esa pareja y la coreografía de Astaire y Hermes Pan, ayudaron a hacer del baile un elemento importante de las películas musicales de Hollywood.
Fuentes: Wikipedia. Filmaffinity .loqueyotediga.net: "Sombrero de copa" y "Cheek to cheek" Googles imágenes.
2 comentarios:
Para mi, que Ginger no se equivocó. Ese vestido se mueve de maravilla y le dá un aspecto etéreo, como si fuese una bailarina de ballet. Con otro vestido no hubiese sido lo mismo.
Interesante entrada, no tenía idea de todo lo que has contado.
Besos.
Yo tampoco sabía lo del vestido, pero indagando descubrí esa anécdota del vestido, y me encantó. Plumas de avestruz teñidas volando alrededor de los bailarines, como dices el toque perfecto para que parezca algo étereo.
Saludos Durrel.
:)
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