Un día soñé que podía levantar un mundo. Ese
mundo no estaba hecho de nada, no era de papel, ni de piedra, no era de madera
ni de metal, no era de nada que se pudiera tocar, y aún así tenía forma, una
forma indefinida e inacabada que poco a poco se ha ido levantando en el aire. Ese
mundo no se mantiene con hilos, no se sostiene con nada, no sé siquiera si lo
que hace es flotar o viajar… ¡pero es un mundo!
Llego a ese mundo por un caminito sin
huellas perdido en una maleza de letras. Está a la vista aunque parezca
escondido, y no se trata de magia, ¡yo puedo verlo y otros también!
¿Lo habita alguien? Sí, está habitado, y
a veces llegan mensajes y se van, y vuelven. Son como luces que caen como
lluvia… no se apagan enseguida, laten un rato hasta que empiezan a trenzarse
como ramitas que se hunden en la tierra y dan frutos, y flores.
Es un planeta transitado y cambiante, es
un mundi chiquitito de colores… los
días de lluvia huele a tinta, los días ventosos a nube rosa, en los días calurosos
desprende olor a helado de limón y los nublados a té de menta.
A veces se mueve, y todo tiembla durante
unos minutos como en un terremoto. He descubierto que cuando eso pasa es porque
ella está bailando. Ella… ella es la jefa, dicen que es la que sueña. A veces la
oigo cantar, es una voz musical que perfuma hasta el último rincón… ella no se
da cuenta pero cuando habla es como si cantara, creo que eso es por su acento
que según ella fue fraguado a la sombra de un volcán. Se deja ver poco, pero me
ha dado tiempo a saber que es un ser tranquilo, amante de la paz y los animales…
Es medio gato huraño. Trafica con palabras. Y en ocasiones con imágenes. No
está cansada de acarrear carretillas pues no le pesan esos retales, no le carga
amontonar vocales o consonantes, ama los colores brillantes, los sonidos estimulantes,
los relatos inspiradores… Su mundo no es viejo ni nuevo, aún anda en periodo de
construcción. No entiendo que siga en obras porque da la impresión de que ya no
quedan huecos vacíos, se ve lleno, colmadito, parece atiborrado y abastecido,
pero ella dice que no, que al tratarse de un mundo elástico aún hay sitio para más
cosas, no creo que su intención sea hincharlo hasta que reviente. Hoy me he
dado cuenta que ella soy yo, ella está fuera y yo dentro, ella es grande y yo
plana, ella se llama Ana y yo Bohemia, pero somos la misma persona, ambas
llevamos cinco años perfilando este lugar que a veces se siente cálido y
acogedor según mi humor y el suyo. Somos un buen equipo, conectamos y nos
llevamos bien, es fácil al tener tanto en común. Y aquí seguimos cinco años después,
fabricando un lugar al que las dos llamamos Bohemio Mundi.
No
es que me haya vuelto bipolar, es sólo el recurso que se me ha ocurrido para
hablar de mi avatar, de esa parte mía colorida y bohemia que vive en mundo como
aquel principito entregado a su rosa que es este blog. Pobre rosa cuanto me ha costado este año que
no se deshoje, que no palidezca… ¡pero ha resistido tanto! Cinco años nada
menos. Uff, vuelvo la vista atrás y me sorprende que este blog haya llegado a
celebrar su quinto aniversario… y más me sorprende que después de tanto tiempo yo
siga aquí repitiendo una por una las mismas sorprendidas palabras. Que a día de
hoy Bohemio Mundi se sostenga en pie es genial pues tengo que reconocer que
este 2013 ha sido el de su primera crisis existencial (por así decirlo). Pero
las ganas siempre pueden más, el compromiso con algo que es tuyo, que tú has
construido, que has cuidado, que has cultivado, que has adornado, que has
alimentado con tu dedicación y con buenas dosis bohemias, cinéfilas, lectoras,
soñadoras, amigas…
Hoy tengo la suerte de soplar las cinco velitas
de este cumple blog virtual. Y cuento contigo (tú que te acercas a compartir mi
locura bohemia) en esta celebración… así que, ¡choca esos cinco!
Música: Queen - Bohemian Rhapsody.
7 comentarios:
Fantástico, original y sorprendente. Dedicación es la palabra aunque más de una vez estemos a punto de tirarlo todo por la borda. Felicidades por esos cinco años de palabras y letras, de sentimientos y emociones, de acción y construcción. Seguiré leyéndote.
Ana. Feliz cumple blog amiga, que sean muchisimos más de cinco. Cada vez que vengo a visitarte, me voy con algo positivo tus comentarios sobre pelis o libros me ayudan muchas veces con mis dudas, otras como hoy encuentro un relato casi poético de tus andares de colores, con olor a tinta, delicioso helado de limón y aromas a menta. Gracias por dejarme compartir un poquito de tu Bohemio Mundi.
Un afectuoso abrazo, desde el otro lado delmar.
Hola amparo, gracias a ti por estar en el cinco aniversario de este blog. Ya es un blog con añitos, y el desgaste parece que no pero se siente, de todas formas lo que me ayuda a seguir es en parte la reacción de personas como tú que descubren este pequeño mundo y se quedan a explorarlo.
Un abrazo
:D
Hola Roberto, muchas gracias por seguir estando por aquí, por seguir visitando este pequeñito mundo de colores que hoy parece que huele a té de menta... Ojala pudiera adornar este planeta con dosis mas poeticas pero no tengo esa facilidad romantica, jaja. Me alegro mucho de tenerte por aquí y de tu impresión tan positiva, me da fuerzas para seguir construyendo este mundi.
Un fuerte abrazo
:D
Yo también lo veo. ;D
Felicidades. Cinco añitos son muchos en esto.
Hola Einer, muchas gracias por la felicitación, un placer que estes en el quinto aniversario de este blog.
:)
Cinco años en esta galaxia, compartiendo letras, magia, música, color... Qué rápido pasa el tiempo, pero pasarlo en tu blog nunca tiempo perdido, siempre saco algo alegre de este mundo bohemio y de la soñadora que lo creó.
Un beso :)
Gracias Raque, sin ti esto no tendría sentido, no sería lo que es, tú siempre eres mi mejor inspiración geme...
;)
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