Había algo en nuestras voces, algo que compartíamos al unísono, notas rotas por un placer simultáneo que iba creciendo en un viaje lento. Cuando alcanzamos las estrellas y bajamos a la Tierra lo hicimos a toda velocidad, como dos meteoritos que se estrellan, que se deflagran, que se desparraman, que se convierten en polvo y que estallan. Todo había estallado y ahora volvía a la normalidad… La atmosfera se normalizaba. Ya no nos costaba respirar, ahora sólo teníamos que creernos que había pasado. ¿De verdad había ocurrido?, ¿habíamos sido lanzados al espacio y la gravidez nos había vuelto a recoger?, ¿caíamos sin paracaídas? Pero el golpe fue suave, fue bueno, sobre un colchón de plumas, plumas viajeras sobre sábanas deshechas.
Música: Dormir contigo-Luis Miguel
7 comentarios:
Explosión de los sentidos. Me encantó este relato.
Besitos
He salido disparada al espacio y vuelto a bajar a toda pastilla, menos mal que el aterrizaje a sido en sitio suave. Me ha gustado mucho la comparaciom. Un bessito
Gracias lopillas, ¡que bien que te guste el relato!
Besitos
;)
Gracias Men, menos mal que el aterrizaje fue suave y agradable, jeje. Me alegro que te haya gustado el relato.
Besitos
;)
Muy bonito, Ana. Preciosas sensaciones, y bonita canción.
Besos.
Muakssss Raque
;)
Qué sensual. Me gusta. =)
;)
gracias
Publicar un comentario