Los cuadros de Van Gogh son sugerentes, expresivos, llenos de pinceladas descontroladas que en su conjunto, (a primera vista de caos), expresan una emoción muy profunda como si estuviéramos dentro de un sueño, un sueño producto de una mente atromentanda.
Él encontraba su fuerza y su equilibrio en la pintura y ella le arrastraba a un mundo interior fascinante.
Él encontraba su fuerza y su equilibrio en la pintura y ella le arrastraba a un mundo interior fascinante.
Este paisaje, a diferencia de otros cuadros, no fue pintado al aire libre, sino desde la habitación del sanatorio dónde sólo podía ver el cielo a través de una pequeña ventana. A Van Gogh le atraía especialmente la noche porque desplegaba una luz especial, de ese modo las estrellas y la luna daban vida a un paisaje adormecido e inmóvil, donde el color del cielo no se corresponde con la realidad, sino con las emociones.
Vincent Van Gogh (1853-1890) llegó a pintar 900 cuadros (27 de ellos autorretratos), 1.600 dibujos y escribió 800 cartas, 650 de ellas a su hermano Theo, el único que le comprendía.
Pese a su dedicación a los dibujos, muchos maestros de este arte le dijeron que nunca iba a ser un pintor profesional porque no sabía pintar.
Pese a su dedicación a los dibujos, muchos maestros de este arte le dijeron que nunca iba a ser un pintor profesional porque no sabía pintar.
Vincent fue siempre un hombre solitario, de aspecto desaliñado y con la mirada hundida y perdida. Decía que solamente se sentía un ser humano lúcido cuando pintaba, ya que podía llegar a llorar cuando lo hacía.
En 1880 comenzó a pintar de forma más continua, y en 1886 se muda a París con su hermano Theo, en donde conoce a todos los artistas de la época, es decir, los llamados Impresionistas. En 1888 se traslada a Arles, en donde fundaría un taller con Paul Gauguin, pintor post impresionista y expresionista.
El débil estado de salud mental de Van Gogh provoca que una noche trate de atacar a Gauguin, y poco después se corte una oreja, la cual regala a una prostituta.
El débil estado de salud mental de Van Gogh provoca que una noche trate de atacar a Gauguin, y poco después se corte una oreja, la cual regala a una prostituta.
Van Gogh sufría de crisis epilépticas, tenía ataques paranoides y esquizofrénicos, y estuvo recluido en hospitales para enfermos mentales de manera voluntaria.
Su aspecto desaliñado y depresivo alejó de él cualquier posibilidad de triunfo amoroso. En el sanatorio de Saint-Rémy-de-Provence le es habilitada una habitación para que siga pintando. Aquí empezó una frenética vida artística en donde se inspiró en Rembrandt.
Durante los últimos treinta meses de vida llegó a realizar 500 obras y en sus últimos 69 días firmó hasta 79 cuadros.Finalmente, el 27 de julio de 1890 sale a caminar por el campo, se dispara con un arma de fuego en el pecho y regresa a su habitación para morir dos días después, dejando inacabado el cuadro llamado "Los Cuervos".
En su entierro todos los que le conocían trajeron flores amarillas para su tumba.
2 comentarios:
Me encanta Van Gogh; la intensidad del color y el trazo, es inquietante pero vitalista.
Fue un hombre muy atormentado y desgraciado, tuvo una vida muy dificil, de penalidades, aunque curiosamente sus obras desprenden luz.
Realmente el arte es una via de escape.
Van Gogh no fue valorado en su tiempo, quizás si lo hubiera sido no habría pintado todo lo que pintó. A veces un fracaso no es una excusa para tirar la toalla, nunca hay que rendirse ni dejar de hacer lo que a uno le hace feliz, pintar, escribir....
Gracias ;)
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