Zugarramurdi es un municipio español de
la Comunidad Foral de Navarra, situado en la merindad de Pamplona, en la
comarca de Baztán y lindante con el pueblo francés de Sara. El municipio está
compuesto por 5 lugares habitados: Azcar, Echartea, Madaria, Olarur y
Zugarramurdi. Su término municipal tiene una superficie de 5,649 km².
Al igual que Urdax, Zugarramurdi fue un
poblado de caseríos abandonados bordeando el monasterio de San Salvador antes
de adquirir jurisdicción civil. Fue declarada Villa en 1667.
La Cueva de Zugarramurdi
Cueva“Sorginen Leizea” constituye un
impresionante complejo cárstico superficial situado a menos de medio kilómetro
de distancia del casco urbano de Zugarramurdi en dirección oeste, en el antiguo
camino Zugarramurdi-Sara, que lo atraviesa parcialmente. La cavidad principal
fue horadada por una corriente de agua, aún caudalosa en la actualidad,
denominada la Regata del Infierno o "Infernuko Erreka" que la
atraviesa conformándola como un amplio túnel cuyo eje se orienta de noreste a
suroeste, alcanzando una longitud de 120 metros, y una amplitud de 22 a 26
metros en su extremo oriental y unos 12 metros en su salida o boca occidental,
así como una altura media de 10 a 12 metros. El conjunto se completa con dos
galerías más altas, de orientación similar a la galería principal, que se abren
a la misma.
El nombre de este conjunto cárstico hace
mención a las celebraciones paganas que tenían lugar en algunas de sus salas en
la antigüedad y que, en el Proceso Inquisitorial de 1609 a 1614, fueron
presentadas como prueba evidente de que en Zugarramurdi se desarrollaban actos
donde se ejercía la brujería.
El pueblo de las Brujas
Zugarramurdi es un enclave mágico y
natural marcado por las leyendas sobre brujas y aquelarres. La palabra
aquelarre proviene del vascuence. "Aker" significa macho cabrío y
"larre"prado. Prado del macho cabrío.
A sólo medio kilómetro de distancia del
pueblo están las cuevas de Zugarramurdi (Sorginen Leizea). Hasta el siglo XVII
este misterioso lugar dio cobijo a brujos y brujas que se reunían para celebrar
aquelarres o sabbats: reuniones paganas, danzas alrededor de una hoguera,
festines, sacrificios u orgías en noches de luna llena.
En 1608 una joven de Zugarramurdi, María de Ximildegui, regresó al pueblo
después de haber pasado una temporada en Francia. María reveló a sus vecinos
que allí se convertía en bruja y volaba con la ayuda del diablo, les contó sus
sueños, visiones y afirmó haber participado en aquelarres junto a otros
habitantes del pueblo. El rumor de su testimonio llegó a oídos del tribunal de
la Inquisición de Logroño y los sueños de la joven se tornaron pesadillas.
Cincuenta y tres personas de la comarca
fueron encausadas por el Santo Oficio, muchos fueron muriendo por el camino y
otros en las celdas. El 7 de noviembre del año 1610 se celebró un Auto de fe
que impactó a toda Europa, en el cual se perdonó a veintiuna de las personas
arrestadas y se condenó a once a la hoguera. Zugarramurdi se convirtió en
"el pueblo de las brujas".
Hay una leyenda que dice:
Había
una vez dos hermanos huérfanos: el pequeño era sencillo y humilde, el mayor
duro y audaz. Un día neblinoso de otoño se perdieron al anochecer. El menor,
cansado, le propuso a su hermano descansar junto a un peñasco, pero éste
rechazó la propuesta y le abandonó para seguir la marcha. Al verse solo, el
pequeño sintió miedo, se encomendó a Dios y se escondió dentro del tronco de un
árbol que yacía sobre la hierba en el centro de una pradera. A media noche, los
gritos de una multitud de brujas que aguardaban la llegada del demonio le
despertaron. El diablo apareció transformado en la figura del macho cabrío y
las brujas comenzaron a relatar todas sus fechorías. El niño, que se ocultaba
en el interior del tronco del árbol, descubrió que una de las mujeres allí
presentes era la causa de la enfermedad de la única hija de un duque y que su
muerte era inminente. Una vez se marcharon todas la brujas, el niño tomó el
camino con dirección a la casa del duque para contarle lo sucedido. La niña se
curó y se convirtió en una hermosa joven que agradecida contrajo matrimonio con
su salvador.
Cuando
el hermano mayor conoció la historia del pequeño sintió envidia y una noche
decidió adentrarse en el monte para buscar la pradera de las brujas. Cuando la
encontró se subió al tronco y aguardó la llegada de la noche, quería descubrir
otro secreto que le proporcionase fortuna como a su hermano. Pero cuando llegó
el demonio mandó a las brujas registrar el árbol y éstas le sorprendieron
escondido en el, le atraparon y le tiraron por un barranco.
Fuentes:
Wikipedia.
Google imágenes.
4 comentarios:
Desde luego ese conjunto cárstico tiene una pinta que da miedo, no me exttraña que fuera refugio de brujas.
Curiosa la leyenda de los hermanos, no deja de ser la envidia la madre de todos los males de la humanidad, que no perdona ni lazos de sangre ni nada.
Me ha encantado esta entrada sobre las brujas de Zagarramurdi. Por ciero ¿has visto la película? dicen que te mueres de risa :)
Un besito.
Desde luego ese conjunto cárstico tiene una pinta que da miedo, no me exttraña que fuera refugio de brujas.
Curiosa la leyenda de los hermanos, no deja de ser la envidia la madre de todos los males de la humanidad, que no perdona ni lazos de sangre ni nada.
Me ha encantado esta entrada sobre las brujas de Zagarramurdi. Por ciero ¿has visto la película? dicen que te mueres de risa :)
Un besito.
Muy interesante tu entrada amiga Ana, en todas partes se habla de leyendas de brujas, acá en Argentina también hay ciertos lugares con leyendas de reuniones de brujas y el diablo, en ciertas noches donde los conjuros y brebajes mágicos terminan en grandes aquelarres. Por suerte aquí no llegó la inquisición donde murieron tantos inocentes por el solo echo de no ser "normales" su forma de ser o de vida.
Abrazos.
Hola Montse, no quiero imaginarme esa cueva por la noche sólo iluminada por la luna, que horror...
La envidia siempre es castigada, por lo menos en los cuentos y leyendas.
He visto la pelí pero no la encontré tan graciosa supongo que no me va el humor escatológico, jeje.
Un besito
:D
Hola Roberto, pues menos mal que la Inquisición no llegó tan lejos porque fue un periodo muy oscuro y muy injusto por todo lo que hemos sabido después. Que pena que se condenara a tantas personas sólo por fanatismos religiosos, cuando seguramente eran mas inocentes que los que los veían como demonios. Lamentablemente la historia está llena de barbaries.
Un abrazo grande
:D
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