Nuestro cuerpo está compuesto, por
término medio de 60% de agua, 39% de materias orgánicas (lípidos, prótidos,
glúcidos), y el 1% de sales minerales.
Tenemos 650 músculos y 206 huesos (en
realidad nacemos con 300, pero 94 de ellos se sueldan entre sí en la infancia).
El estornudo viaja a una velocidad
aproximada de 170 kilómetros a la hora.
Segregamos 1 litro de saliva al día, lo
suficiente para llenar una botella.
Al día producimos una media de 150 gramos
de heces, lo que al cabo de una vida supone cerca de 4 toneladas. La evacuación
líquida se cifra en unos 540 litros de orina al año, consumiendo una media de
1,5 litros diarios de agua.
0,9 segundos de reacción al dolor.
Nuestro manto cutáneo, extendido,
ocuparía una superficie de 1,5 metros cuadrados.
Poseemos 200.000 kilómetros de venas. Y
por ellas corren aproximadamente 5 litros de sangre.
Producimos 3 millones de cabellos en toda
una vida, teniendo en cuenta que cada pelo vive unos 4 años. Los cabellos
crecen una media de 0,35 milímetros al día, lo que supone 12,8 centímetros
anuales.
A lo largo de nuestra vida derramamos
alrededor de 70 litros de lágrimas
La lengua mide unos 10 centímetros de
largo.
Una persona produce unos 18 kilos de piel
inerte a lo largo de su vida.
Las uñas crecen medio centímetro a la
semana.
Podemos distinguir hasta 5000 olores
distintos.
Parpadeamos unas 15 veces por minuto.
Tenemos 32 dientes.
El intestino delgado mide unos 6 metros.
El grueso 1,5 metros.
Los pulmones adultos tienen una capacidad
media de 3 litros de aire y respiramos unos 6 litros por minuto. Unos pulmones
sanos tienen más de 300 millones de alvéolos, con los que se puede llenar la
mitad de un campo de fútbol.
En el momento de la eyaculación un hombre
sano expulsará de 150 a 400 millones de espermatozoides.
En el momento de nacer una niña tiene
1.000.000 de óvulos en sus ovarios.
En un milímetro cúbico de nuestro cerebro
hay unas 40.000 neuronas y 1.000 millones de conexiones de fibras nerviosas.
440.000 millones de células son las que
el organismo humano va perdiendo en un día, que se reemplazan enseguida.
Tenemos alrededor de 100 billones.
Un hombre llegado a la edad adulta pesa
20 veces más que en su nacimiento y su talla ha aumentado más de un metro.
A los 60 años, un hombre ha respirado
casi 260.000 m³ de aire y ha absorbido 65 toneladas de alimentos; su corazón ha
bombeado 180.000 m³ de sangre.
Conclusión: A pesar de los grandes
progresos de las ciencias, el hombre jamás conseguirá construir una máquina tan
perfecta como su propio cuerpo…
10 comentarios:
Mil aplausos y mil besos, qué digo mil ¡millones de ellos! por este post tan original y didáctico.
Sabíamos que el cuerpo humano es algo maravilloso, pero con estas cifras, es aún más impresionante, es, como has dicho, la máquina perfecta ¡y lo poquito que lo valoramos!
Metros, litros, kilos, milímetros y billones.. ¡una pasada!
Muchos millones de gracias, Ana.
Una entrada de lo más interesante. Hay que ver lo que llegamos a inhalar, bombear, cambiar... durante toda una vida.
Y me ha gustado mucho ese dibujo de órganos con esos colores tan Warholianos.
Saludos!
Borgo.
Tremenda máquina! Y lo que más me alucina es toda la vida que alberga dentro ahí por libre sin pedirnos permiso ni opinión. :O
Besitos Bohemia!
Hola Montse, impresionan estos números, la verdad es que somos una maravilla de la ingeniera, hace tiempo también hice una entrada sobre el cuerpo humano, somos un cosmos por dentro, y lo somos, no hay duda.
Besos, feliz finde
:D
Hola Miquel, da vértigo, jaja, es que imagínate el trabajo que hace nuestro cuerpo en tantos años, por eso debemos tratar bien a nuestro cuerpo, es una maquina que hay que mantener bien engrasada para que no falle.
Yo soy muy Warholiana, jeje
Saludos
;)
Hola Lopillas, eso es lo mas alucinante, que actúa, hace, trabaja, piensa, dice... y a veces nos parece que no lo controlamos, es la vida de dentro de nosotros como dices.
Besotes
:D
¡Impresionante, Ana!
Ya te echaba de menos y pasaba por aquí. Llego tarde, veo, pero he llegado, al fin y al cabo. ;)
Es increíble cómo tu blog es cada día más interesante. Siempre me impresionas con tu ingenio....
Un gran abrazo, amiga.
Una máquina demasiado compleja, cuesta trabajo pensar que funcione con tan alambicado mecanismo. Quizás sea por eso que presenta tantas averías, desde las más simples a las mas elaboradas.
Hola Carol, no llegas tarde, llegas cuando llegas, jaja, eso dice mi padre. Pues la idea para esta entrada me la sugirió una historieta mía de hace un par de años, ¿recuerdas a aquel Científico loco? Una de sus aventuras va sobre este tema.
Un fuerte abrazo amiga Carol
:D
Hola Pepe, eso es lo malo, que a veces la avería de esa maquina tan perfecta a veces se complica demasiado, no hay suficientes recambios para nosotros.
Saludos
:)
Jajaja, recuerdo muy bien al científico, Ana, y me atrevería a confesar que lo echo de menos. ;)
Jajaja, recuerdo muy bien al científico, Ana, y me atrevería a confesar que lo echo de menos. ;)
Ay Carol, que cariño le tengo yo a ese personaje, te diré que seguí su historia, y llegué a las 390 páginas, todas llenas de preguntas y curiosidades cinetificas, a ver si un día comparto contigo algunas.
Gracias.
;)
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