..Peores por mal hechas.
Aunque las bolas mágicas existen desde
hace tiempo parece que no todas son muy fiables, será que no todas tienen el
mismo radio de acción, y claro, si las ondas no están bien sintonizadas no hay
quien vea nada… Ya, ¡que escéptica parezco! Bueno supongo que soy de las que
piensan que aunque quisiéramos (que queremos), tampoco podemos confiar en el
sexto sentido de ciertas personas. Y para muestra un botón.
Aquí las más estrepitosas predicciones
fallidas de quien se aventuraron a predecir lo que iba a ocurrir sin mucho tino:
Steve
Ballmer, CEO de Microsoft anunció en 2007 que el primer smartphone de Apple no
iba a tener éxito. “No hay ninguna posibilidad de que el iPhone
vaya a conseguir alguna cuota importante de mercado. No hay posibilidad", dijo. Ese año Apple vendió más de 116 millones de
iPhones. Ballmer se ha mantenido en Microsoft, hasta ahora, que recién ha
anunciado su decisión de jubilarse en 2014.
En 1987 un meteorólogo británico llamado Michael Fish respondió a una telespectadora,
preocupada por la llegada del fenómeno atmosférico, de este modo: "no habrá ningún huracán".
Según él los televidentes de la BBC podían estar tranquilos, pero horas más
tarde un potente huracán con vientos de más de 300 kilómetros por hora barrió
Gales dejando 19 muertos.
En
1962, los Beatles fueron rechazados por
la importante firma discográfica Decca Records. Les negaron la audición, porque según señaló un ejecutivo y
productor musical al manager de la banda: "Los Beatles no tienen futuro en
el espectáculo. Este tipo de grupos están pasados de moda". No hace
falta contar el resto de la historia…
En 1929 un prestigioso economista
estadounidense llamado Irving Fisher
dijo que las acciones, que habían alcanzado "un
nivel máximo de meseta", se mantendrían estables. Pero sólo tres días después ocurrió la debacle: no
sólo no se mantuvieron estables sino que cayó la Bolsa en lo que se llamo el
crack del 29 sumiendo a toda una nación en el periodo llamado la Gran depresión.
A pesar de todo, Fisher, siguió tranquilizando a los inversores augurando una
recuperación que siempre estaba a la vuelta de la esquina.
El efecto 2000 dio mucho que hablar en los últimos años de los 90, que estuvieron llenos
de pronósticos sobre el fallo general de todos los sistemas informáticos por el
cambio del milenio. Los expertos auguraron un caos informático porque, oh no, el
software funcionaría sólo durante los años cuyos nombres comenzaran con 19...
Se invirtieron miles de dólares para evitar el desastre y al final no ocurrió
nada de lo pronosticado.
En
1966 el futuro de la sociedad, mas concretamente el comercio electrónico, fue
imaginado por la revista TIME en un artículo. Pero todos los argumentos estaban
en contra. Según los inspirados redactores, esta práctica (que nos parece ahora
tan cotidiana) iba a ser un fracaso porque a las mujeres les gustaba salir de
casa a hacer las compras.
Actualmente las compras en internet facturan cada año millones, y además, muchos
de los usuarios ya adquieren todo desde sus dispositivos, cómoda y
sencillamente.
Los fabricantes del Titanic aseguraron
que el buque no podía hundirse. Phillip
Franklin, vicepresidente de la White Star Line, explicó que “el barco es
insumergible". Su predicción duró un soplo: El Titanic se hundió en su
primer viaje.