Gozo con cada bostezo de mi cigarrillo,
humo flotante e hipnótico que viaja lento por el aire en un turbio baile que
inicia mi inmersión en un mundo irreal, extraño y perezoso que se alarga como
un pasillo en tinieblas. Hay grandes pastos, hongos con gorritos absurdos,
orugas malvas con anteojos, bichitos que me rozan las plantas de los pies en la
alfombra. Nadie más puede verlos pero yo sí, se ríen con bocas humanas llenas
de dientes romos y su lengua es verde. El conejo blanco acaba de huir por la
puerta mientras yo me hundo en el sofá, tragado por el monstruo de las pelusas
que ha crecido debajo del cojín. Me desplomo, bajo, viajo a través de un desfiladero
lleno de saliva. Voy hacia la luz, soy un creyente, un mago, un espíritu que no
existe, floto y recorro ríos de colores, mis pupilas van pasando diapositivas
al tiempo que mis pestañas aletean a ocho mil revoluciones. Soy un latido, un
eco, una paradoja, un cuerpo desposeído de la suntuosidad de su propia carne.
Pero nada pesa. Y grito de alegría. ¡Qué blando es el suelo! Soy un naufrago en
una playa cuya arena huele a bicarbonato. Bosques, mundos, cosmos, una barriga
llena de naves hundidas. Buceo en los arrecifes, escalo los macizos, respiro
burbujas, voy llegando. Y allí está, hay otro como yo, ahí, embelesado. Él ve
los negativos, el sepia y gris, el blanco y negro, los paraísos y los destierros,
un hombre serio que sostiene un maletín de médico. Mares, hay mares mas allá de
la luna, ojos sobre Marte, señores con coronas de flores que llevan los pies
desnudos, descalzos corren entre los anillos de Saturno despidiendo estrellas
de sus talones salvajes. Solo quiero la paz.
Música: Belle and
Sebastian - Today This Army's For Peace
5 comentarios:
Oye que me ha encantado el viaje! En serio, una lectura y una música fantástica para un día agotador.
Gracias guapísima! Besitosss
Gracias a ti Lopillas, me alegro de que el relato y la música te haya hecho viajar.
Besotes!!!
:D
Un texto entre divertido y bucólico que me ha gustado mucho.
Sabes hilvanar bien las letras, Ana.
Mil besos.
Bueno, bueno y bueno. Cada día te superas a tí misma. Magnífico texto que ha originado mil imágenes en mi cabeza. La arena que huele a bicarbonato... Ya puedes cuidar bien a tu musa porque parece que tu inspiración no tiene límites. Enhorabuena.
Hola Montse, muchas gracias de nuevo por leerme y agradecida de que te guste.
Mil besos, guapa.
:)
Hola Amparo, que halago viniendo de ti, muchísimas gracias por tu comentario, no sabes la ilusión que me hace, en serio, lo valoro muchísimo. Sí, tendré que seguir alimentando a la musa igual que lo haces tú, jeje, para tenerla contenta.
Un abrazo
:)
Publicar un comentario