viernes, 2 de agosto de 2019

Corcheas



Tu voz me llega con cada golpe que doy al piano, me llega como la respiración de un asmático, chirriando como si los pulmones fuesen una maquina vieja. Ay papá, me digo para mis adentros. Papá te fuiste sin contarme tu secreto. ¡Qué lejos estás ahora!, y que lejanos parecen aquellos días de mi infancia, yo sentado ante el piano y tú a mi lado, chimenea viviente, aplaudiendo cada vez que atinaba una melodía, con los dedos llenos de ceniza, con tu risa bronca y severa, con tus ojos ardientes como las colillas que siempre te rodeaban. Quiero recordarte y te veo como el humo, indefinido, una serpiente vaporosa que se deforma con el oxígeno de la habitación, ya te estabas muriendo y nunca lo vi, ¿cómo iba a verlo?, ¿cómo suponer que cada cigarrillo era una pequeña puñalada en tus pulmones sin aire? Garganta con arena era el mote que tus amigos te habían concedido que tú aplaudías con una mezcla de sátira y sarcasmo. Lo veías y no lo veías, no lo querías ver. Los días se te hacían largos cada vez que intentaste dejar el vicio y por eso nunca te animaste, no te alcanzaba el valor de enfrentar un día sin nicótica, tu narcótico, tu sedante, tu escape de ti mismo. Si te dolía sólo tú lo sabías porque nunca lo dijiste, igual que nunca me confesaste quien te enseñó a tocar el piano, tu primer vicio, tu profesión, tu pasión, y en tus últimos años de invalidez tu frustración, ¿qué hay de un pianista sin dedos? La vida arrolló lo que eras igual que aquella camioneta descontrolada tu cuerpo de cincuentón maltrecho. Le dedicaste esfuerzo y ganas a tu recuperación pero el vicio y el alcohol ganaron la partida, nunca volviste a reiniciar el juego aunque todos te lo echaran en cara. Y mamá se fue. No quería verte perder. Ya perdí mis manos, decías con dramatismo, y te dedicaste a ir por la vida haciendo equilibrios, sin aire, sin ganas, sin ganas de seguir enseñándome tu canción, perdiéndolo todo, peor, tirándolo a la basura. Y ya me ves ahora papá, un pianista sin inspiración, sin voz, sin emoción, sólo porque cada vez que me siento ante el teclado te oigo a ti, te siento a ti, y no puedo aguantar la idea, no la soporto, de que ya no estés en el mundo, ni tú, ni tu olor, ni esa nube de tabaco revoloteando siempre en tu cabeza, ni tu risa, ni tus aplausos desmesurados, ni esa historia que nunca me contaste, ni lo que nunca me enseñaste. 


Música: Pablo Ziegler-Oblivion

5 comentarios:

lopillas dijo...

Una amiga que está pasando por un momento insoportable me dijo que el cigarro era la mejor manera de autodestruirse :(
El relato es muy conmovedor, una mezcla de dolor y amor.
Besitos bohemia

miquel zueras dijo...

Una historia desgarradora, con mucho humo y también cariño.
Mi madre se fue hace poco, dejó el tabaco demasiado tarde.
Mi padre tocó mucho tiempo en una orquesta y por si quieres echar un vistazo tengo una anécdota divertida de cuando practicaba piano:
miquel-zueras.blogspot.com/2011/06/aquella-terrible-sed.html
Saludos, Ana!
Borgo.

Kasioles dijo...

Es la primera vez que entro en tu espacio y entre la música y el relato, me has tenido enganchada por un buen rato, te lo agradezco de corazón.
De todas formas, he de reconocer que, en todo él, hay un poso de tristeza.
La falta de ilusión en la vida nos lleva a caer en todo lo peor, en tu relato ha sido el tabaco y la bebida, y lo cierto es que el humo va obstruyendo las vías respiratorias y acaba con la salud del más fuerte.
El fumador no solo se hace daño a sí mismo, su entorno suele sufrir, a la larga, las mismas consecuencias como fumadores pasivos.
En fin, ha sido un placer leerte y me ha encantado.
Cariños.
Kasioles

Ana Bohemia dijo...

Hola Lopillas, sí, desgraciadamente hay muchas maneras de destruirse a uno mismo, de anestesiar esos dolores insoportables de la vida.
Un besote
:)

Hola Miquel, gracias por linkear la anécdota. Hay vicios que se dejan demasiado tarde. Gracias por leerme y comentar.
Un abrazo
:)

Hola Kasioles, has entendido muy bien el relato, hay mucha tristeza detrás de las palabras, dolor y pérdida. Cuando no se le encuentra el sentido a la vida es mas fácil caer en malos hábitos.
Muchas gracias por leer mi blog, un placer.
Saludos, y hasta otra...
:)

Sages Marketing dijo...

Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget
Money Gadget

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...